La disputa comenzó cuando el Ministro de Transportes español dijo que el argentino Javier Miley había consumido drogas durante las elecciones del año pasado.
España y Argentina han sacado dagas diplomáticas e intercambiado sarcasmo sobre el uso de drogas y el declive económico.
La disputa comenzó el viernes cuando el ministro español de Transportes, Óscar Puente, durante una mesa redonda en Salamanca, sugirió que el presidente argentino, Javier Miley, había consumido «sustancias» durante la campaña electoral del año pasado.
«Vi a Miley en la televisión» durante la campaña, dijo Puente en una conferencia del Partido Socialista.
«No sé si fue antes o después de consumir los… materiales».
También enumeró a Miley entre algunas «personas muy malas» que han alcanzado altos cargos.
La oficina de Miley respondió el sábado en un comunicado condenando los comentarios y también atacando al primer ministro español, Pedro Sánchez.
El comunicado acusó a Sánchez de «poner en peligro a las mujeres españolas al permitir la inmigración ilegal» y de socavar la integridad de España al hacer tratos con los separatistas, mientras que sus políticas de izquierda han traído «muerte y pobreza».
– Oficina de la Presidencia (OPRArgentina) 3 de mayo de 2024
España respondió enfadada.
El Ministerio de Asuntos Exteriores español dijo: «El gobierno español rechaza categóricamente las declaraciones infundadas… que no reflejan las relaciones entre los dos países y sus pueblos hermanos».
El comunicado agrega: «El gobierno y el pueblo español continuarán manteniendo y fortaleciendo sus vínculos fraternales, relaciones de amistad y cooperación con el pueblo argentino, deseo compartido por toda la comunidad española».
Esta disputa se produce dos semanas antes de la visita del presidente argentino «anarcocapitalista» a España.
Miley asistirá a un evento del partido de extrema derecha Vox y evitará reunirse con el jefe del gobierno socialista español, Sánchez.
No había buenas relaciones entre los dos en absoluto.
Sánchez apoyó al rival de Miley, Sergio Massa, en las elecciones que llevaron a Miley al poder en diciembre y no ha contactado a Miley desde la victoria.
Mientras tanto, Miley ha apoyado públicamente al partido de extrema derecha antiinmigración Vox en España. El líder de Vox, Santiago Abascal, también viajó a Buenos Aires para la toma de posesión de Miley.
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